El charlatán a sus 22-23 meses…

Buenas…

Como siempre, he intentado escribir este post desde hace unos meses y me resulta muy complicado encontrar el tiempo para hacerlo.

Quiero hablar de Lucas y de su forma de expresarse: el chiqui habla hasta por los codos, charla como cualquier niño, ya no tiene lenguaje de bebé sino de niño mayor, arma frases, opina, dice lo que cree, lo que quiere y lo que le gusta. Es una pasada escucharle y resulta increíble como alguien que aún es un bebé es capaz de hablar de esa forma. Los hermanos también hablaban a partir del año pero no recuerdo que fuera exactamente así, sino que muchas veces había que interpretar lo que decían.

Según los psicolinguistas y la psicología del lenguaje entre los 18 y 24 meses, la mayoría de los niños cuentan con un vocabulario mayor a 50 palabras, pasando a combinar 2 a 3 palabras en una frase, dándose inicio al habla «sintáctica»; es decir, el niño comienza a articular palabras en frases y oraciones simples. En sus expresiones verbales utilizan sustantivos (nombres), verbos (acciones) y calificadores (adjetivos y adverbios).

Lucas usa todo eso y mucho más y además suele lograr cosas que parecen increíbles para su edad, pero yo creo que eso tiene que ver con que quiere y pretende hacer las mismas cosas que sus hermanos mayores sin darse cuenta de la edad que tiene o de lo pequeño que es.

El peque sabe saltar, cantar, correr, subir y bajar escaleras, conoce más de 10 colores y sabe contar hasta 10, aunque se equivoca algunas veces, pero lo que más me sorprende es que sabe conjugar hasta los verbos y los géneros, me deja boquiabierta con sus logros cotidianos…

Pues eso, solo quería dejar plasmado los nuevas destrezas de Lucas que son miles y siguen sumando, la capacidad de aprendizaje de nuestros peques es asombrosa, es verdad que a esta edad son como una esponja…

Tengo 3 peques y voy por el cuarto pero nunca jamás dejan de sorprenderme…

¡Los niños son increíbles!

¡Mi bebé con 8 meses ha dicho mamá!

Sí, ya hace un par de semanas que mi pequeñito ha dicho esa palabra tan grande en la que la vida me ha convertido: ¡mamá!

Se supone que su primer palabra debería ser papá, porque fonéticamente el sonido de la p con la a es mucho más simple que el de la m con la a, para el que hay que hacer un mayor esfuerzo y movimiento de músculos, pero el peque sabe lo que quiere y me lo hace saber.

Bueno, según los expertos al principio cuando un bebé balbucea puede que diga papá o mamá pero sin relacionarlo verdaderamente con las figuras de crianza, pero como dicen todos los padres: ¡es que mi hijo es más listo!…

También ha aprendido a decir «teta» y yo estoy segura que esa sí que sabe lo que quiere decir puesto que la repite una y otra vez cuando es la hora de dormir y les doy teta a los dos. Además, es la palabra que más repite su hermano a diario, jejeje…mateo

Y siguiendo con ese tema también ha «copiado» a su hermano al coger la teta de chupete ya que ahora no se duerme sin la teta en la boca, (y las cientos de veces que despierta la reclama).

Muchas veces se toca la oreja para dormir, como una forma de auto estimulación. Ya se ha descubierto sus «partes» y se las toca; aguanta más tiempo sentado solo y está haciendo intentos de gateo: se pone en «cuatro patas» y se bambolea para adelante y atrás, hasta que se lanza a por algún juguete que está lejos tirándose con fuerza.

Sigue siendo muy, muy nervioso, (parece que ya es su temperamento), ha aprendido a gritar con fuerza como si estuviera enfadado, (pero yo creo que escucha el sonido que produce al hacerlo y le gusta, por lo que lo vuelve a hacer) y el momento que más nervioso se pone es en la comida si no lo dejamos manejarse solito, por ejemplo si le llegamos a dar sopa o alguna papilla de cereales no soporta los segundos que pasan entre cuchara y cuchara, grita y se pone histérico, pero si lo dejamos a su aire le encanta y se lo ve disfrutar muchísimo de poder comer solo.

Tiene muchas cosquillas y se ríe por cualquier cosa, está tan gracioso…mateocrece

También se lo ve gordito, tiene unas piernas rollizas que las muerdo todos los días y está macizo…

Sigue a Samu en todo, se la pasa pendiente de él, pero muchas veces como el hermano se acerca y le molesta suele defenderse gritando como si de un tenor se tratara, jejeeje!!

Y una de las cosas más bonitas: al tomar la teta junto a su hermano le coge de la mano y pueden estar así muuuuuuucho tiempo, pero si Samu no le hace caso, entonces le coge de los pelos, le da manotazos, le muerde con sus dos dientes en la cara, le chupa el pelo y tira de él; en fin, que este chiquitito parece que ya quiere ser el jefe de la casa, no por nada mi querido Freud les apoderaba: «His majesty, the baby»…