Día de la madre 2018

Hoy es otro de los días especiales marcados en nuestra agenda y es nada más ni nada menos que mi séptimo día de la madre.

¿Qué como es ser mamá de 4 peques? una locura total; complicado, muuuuuuuyy complicado.

Jamás hay tiempo para nada, salir a cualquier sitio es una odisea, escribir otra; (ahora mismo siendo la 1am tengo uno detrás mío saltando en el sofá y al bebé tocando el teclado donde estoy intentando escribir).

La crianza respetuosa que intentamos brindar también se complica infinidad de veces porque es imposible respetar las necesidades, deseos y/o decisiones de cada uno cuando son tantos; cada uno exige su lugar y su momento y es imposible poder dar a cada uno lo suyo.  Me ocupo mucho más de los pequeños y es normal, pero los mayores también me necesitan. Incluso el más grande desde hace un tiempo se está portando fatal y creo que es solo porque al echarle la bronca ve que «estoy» con él aunque sea de mala manera…

Hay días que parecen de película, pero ¡de terror! Hay gritos por doquier, llantos, peleas, caídas, por la casa parece que ha pasado un huracán y yo me río por no llorar, juro que hasta rezo implorando más y más paciencia y miro a mi alrededor intentando divisar si hay alguna cámara grabando esos momentos que no pueden resultar peor, no puede ser real tanta locura pero lo es…

Y cuando más loca me vuelvo descubro que siempre hay una luz al final del túnel y encuentro formas de poder sobrellevar esta esperada y desesperada maternidad.

-Por ejemplo, para poder hacer la comida que me resultaba imposible, (Tomás se colgaba de mis piernas y gritaba desesperado con solo pisar la cocina) he encontrado la niñera perfecta y solo me cuesta unos pocos céntimos diarios: le doy un rollo entero de papel higiénico y mientras se lo pasa pipa rompiéndolo a pedacitos yo tengo mi ratito para cocinar.  O también puedo darle el rollo de bolsas de basura, que las deja por toda la casa o hasta dejarle el bidet un pelín abierto para que salga una gota de agua con lo que se entretiene otro rato aunque ponga todo perdido…

-Y respecto al orden de la casa he descubierto que como no se puede mantener y no vale estar enfadada por todo lo que los peques tiran, mejor que barrer, gritar y recoger 20 veces es «aprender a caminar sobre obstáculos» y hacerlo cuando se pueda; me da igual que me llamen guarra porque yo estoy muchísimo mas tranquila, jajaja!!!

-Con mis 4 peques nunca la ropa les dura limpia más de un día y debo poner un mínimo de 10 lavadoras al menos los fines de semana; así que para que esto resulte más simple he separado unas cuantas prendas de ropa para andar por casa y al salir sí que nos ponemos más guapos.

-En mi casa los padres tenemos «prohibido» dormir varias horas seguidas así que cuando mis mayores se van al cole, yo me vuelvo a dormir otro rato con mis pequeños y aunque fuese «necesario» quedarme en pie para limpiar u ordenar, veo que mi cuerpo lo que me pide es descansar, así que hago lo que me parece, sin más…

Podría enumerar miles de cosas como estas más, pero yo solo quiero demostrar que a pesar de muchos momentos de agobio que puede tener una numerosa maternidad, también hay que ver la otra cara de la moneda, encontrar soluciones a los supuestos problemas. No podemos vivir agobiadas, también hay que disfrutar…

Yo me agobio, (y mucho) pero también disfruto, (y mucho) de:

-Ver a mis hijos jugando juntos, riendo, descubriendo el mundo; aprendiendo, creciendo…

-El cariño que me dan y les doy.

-Los logros de cada uno.

-Sus sonrisas, sus miradas, sus ocurrencias, sus palabras, sus locuras…

-Descubrir las personitas en las que se van convirtiendo y lo rápido que pasa el tiempo…

Así que por favor, hoy, en este día tan especial, llenemos de amor esos corazones tan puros, olvidémonos de los agobios y dediquémonos a disfrutar de nuestros hijos; hijos que en poco tiempo volarán y desearemos haber disfrutado más; ahora es el momento, que crecen demasiado rápido

¡Los amo peques!

¡¡¡Feliz día mamis!!!

PD: Gracias a mi mami por existir y ser no solo madre sino también mi amiga y apoyo incondicional. ¡¡Te quiero mamá!!

Momentos de una madre desbordada…(La pura y cruda realidad)

Buenas, (si se puede decir así)…

Hoy voy a intentar transcribir un momento habitual en mi vida de madre de 4 peques, instantes que preferiría que pasen volando pero que parece que se quedan estancados temporalmente.

Un día cualquiera de septiembre me levanto por la mañana después de haber estado «en guardia» toda la noche, (y digo así porque los tengo a todos con mocos y tos), por lo que se despiertan a cada rato, lloran, gritan, piden agua, tienen mocos, no pueden echar las flemas, se ponen nerviosos, viene Mateo histérico a nuestra cama, se despierta Lucas exigiendo teta, por sus gritos despierta al bebé, quien llora hasta que le doy la teta, luego vuelve a llorar Lucas porque le quité la suya hasta que al fin todos se duermen. ¡¡Dios!!

Todos menos yo porque escucho que no respiran muy bien y me quedo sumamente preocupada con miedo a que les pase algo. Me caigo de sueño pero no soy capaz de dormir y me quedo escuchando las respiraciones de los 3 peques que hay en mi habitación mas los ruidos que hace nuestra gata jugando con una bolsa en plena madrugada…Puff…¿Porqué leches habré querido traer a casa una gata abandonada? Se me ocurre cada cosa…

Cuando al fin logro dormir parece que han pasado unos segundos y suena el despertador. ¡Arriba! pero shhh!!, sin hacer ruido, intentando que no se despierten los más peques de la casa… Mi marido les prepara el desayuno a los mayores y los levanta porque tienen que ir al cole; yo les busco su ropa y los visto pero al intentar vestir a Mateo empieza a gritar que no quiere ir al cole y así despierta a los dormidos. Lucas grita, me pide teta, brazos, se levanta con fiebre y Tomás llora sin parar porque quiere seguir durmiendo…Tres de cuatro gritan y Samu no se entera, tiene tanto sueño que pasa de todo… Hacemos milagros para prepararlos y cuando mi marido les lleva, si van caminando tardan media hora en un tramo de 10 minutos; él llega tarde y estresado a trabajar y Mateo se queda gritando en el cole…

Intento volver a dormir a los peques pero están tan espabilados que me cuesta mucho,  y si lo hago es a base de anestesiarlos con teta, por favor, ¡sólo necesito descansar un momento!

Al levantarnos todo se torna algo más tranquilo, pero entre una cosa y otra la hora pasa volando, no puedo hacer nada de la infinidad de tareas que debería y son casi las 13, hora en la que tengo que ir a buscar a los mayores al cole. Voy corriendo con el bebé en la silla donde llora porque no le gusta al no estar acostumbrado, (está todo el día en brazos) y con Lucas en el patín, parezco una loca corriendo una carrera. Llego y justo está saliendo Mateo con otra chaqueta que no es la suya, vuelve a por la otra, corremos porque ya salió Samu por el otro lado del cole. Volvemos a casa intentando hacer rápido porque no tengo la comida hecha y corren, se van por delante mío, otro se queda por atrás, otro se esconde y yo grito. ¡Ahí va la loca! gritarán los vecinos, y con razón…

En casa intento cocinar, pero como tengo a Tomy en brazos resulta tarea muy difícil. Llaman por teléfono y me lo pongo en el hombro porque no tengo manos. El bebé se mueve mucho y se lanza de repente hacia abajo, pero lo agarro de la camiseta evitando que se me caiga por una milésima de segundo. Resoplo e intento calmarme. Intento seguir con la comida. Hasta hace poco había aprendido a hacer todo con una sola mano y encima con la derecha, (yo soy zurda). Tomás no acepta estar en la hamaca, silla, cuna o lo que sea. Sólo en los brazos de mamá.

Resumiendo, comemos mientras Mateo pone los pies en la mesa, la cabeza en el asiento de la silla y da mil vueltas para comer, no quieren lavarse las manos, otro come con la mano porque se niega a usar cubiertos, todos comen poco y al llegar la hora de la siesta nadie me hace caso.

Juegan, corren, saltan en la cama y en el sofá, uno se hace caca, al cambiarlo se hace el otro; los demás se esconden, gritan y yo solo sueño con un momento de descanso…

Después de casi dos horas de reñirlos, los puede más el sueño que el hecho de hacerme caso; se acuestan en el sofá y se van durmiendo los mayores, Lucas exige teta y Tomás llora. La historia se repite para poder dormir.  Les doy la teta mientras siento «agitación del amamantamiento» y me aguanto esa sensación. Cuando al fin los 4 están dormidos la maravillosa siesta dura media hora porque Lucas se despierta a los gritos y despierta a todos.

Se enfadan, gritan, esto es un infierno…

ESTOY CANSADA, AGOTADA, DESQUICIADA, HARTA. NO PUEDO MÁS…

Amo con todo a mis hijos pero hay momentos en los que no tengo más fuerzas…¡ME QUIERO IR CON MI MAMÁ!

POR FAVOR:  ¡¡¡Que el tiempo pase rápido y estos días sean anécdotas!!!

Una madre al límite…

 

Crónica de mi parto

¡Buenas, queridos seguidores!

Hoy es 26 de mayo del 2017. Estoy en mi 38+5 y hace una hora he entrado en paritorio. A ver si llego a contarlo todo antes que venga Tomás …

El domingo pasado tenia mucho flujo y me sentía como mojada, así que me hice un test casero, (llamado «All sense») que detecta perdidas de liquido amniótico y salió una pequeña marca azul que supuestamente significaba positivo. Por lo que fui a urgencias para que me confirmarán o no el tema. Después de 2 amnisures , (test que utilizan en los hospitales por el mismo tema), ecografía,  monitores y dos exploraciones dolorosas el resultado fue negativo, así que me enviaron a casa.

Supuestamente el líquido estaba bien, (he de decir que la exploración me dolió mucho y pensé que podrían haberme realizado la maniobra de Hamilton sin decirme nada al verme tan apurada y ansiosa por tenerlo)…

El miércoles siguiente fui a mi ginecólogo particular y le pregunte acerca de dicha maniobra habiéndome asegurado la noche anterior de informarme y leer absolutamente todo al respecto.

El me lo había hecho con Samuel, así que me exploró,  y me dijo que el bebé ya pesaba 4 kilos y que eso era simplemente una ayuda para acelerar las contracciones y el trabajo de parto, así que por mi cabeza loca que nunca he aprendido a esperar, le dije que me lo haga. Me dolió bastante y al irme más,  tuve contracciones dolorosas pero no suficientes como para volver a urgencias.

Además desde el lunes pasado, justo al día siguiente de la exploración en el hospital, empece a echar el tapón mucoso y el tema es que no había parado de echarlo hasta hoy. Cada vez era más cantidad, mezclado con algo de sangre y cierto dolor de regla, así que volví a urgencias.

En cuanto me exploraron y volvieron a hacer el amnisure dio positivo, la fisura en la bolsa estaba confirmada…

Saberlo me dio una angustia tremenda por temor a que ocurra algo malo, (con Mateo me había pasado).

Me ingresaron y lo de siempre: antibiótico de alto espectro: (augmentine), por riesgo de infección, paritorio para intentar dilatar, rotura de bolsa a las 15hs y goteo de oxitocina…

Empieza el dolor…

Me conozco todo esto de memoria, comienzo sonriendo y luego termino pidiendo a gritos que me lo saquen, mi cara va haciendo una transformación hasta que doy miedo, ja ja ja! !

Son las 16:03, las contracciones son cada vez más seguidas y siento el líquido caliente que no para de salir…

Otra vez toca inducción y solo siento culpa por no haber sabido esperar, pero por otra parte ya es hora de poder conocer, abrazar y ver a mi niño.

Poder ponerle cara al fin y tenerlo entre mis brazos. ..

..16:50 hs Las contracciones son cada vez más fuertes y seguidas, según el monitor han llegado al 117 y ¡cada 5 minutos! Mi cara ha empezado a cambiar, de relajada casi sonriente a cara de jodida por el dolor…

17:30 malditas contracciones, son cada 2 minutos y llegan hasta 127 , voy a pedir la epidural, no tiene sentido aguantar el dolor, este invento es para que las mujeres no sufran y  yo no tengo porque ser masoquista. ..

La anestesista me puso la epidural a las 17:55, gracias a Dios no pasó lo de cuando nació Lucas, (me pincharon un vaso y la anestesia se estaba yendo al torrente sanguíneo), todo ha ido bien así que ahora toca relajarme y esperar…

1845: así Sí que mola , ya no duele nada y siento que el bebé va bajando…Aunque me han explorado y sigo con 3 cm pero el cuello está blando…

1930: siento la cabeza del bebé acercarse a la salida, siento la estrechez y la dureza, se va acercando a la meta… Me exploran y…¡estoy completa!

¡Ya es hora de conocerte pequeño!

Traen un espejo gigante para que yo vea mi propio parto, comienzo a tomar respiración y a empujar, me agarro con fuerzas a la silla de parir y pongo todas mis fuerzas hasta que se me termina el aliento,  vuelvo a coger aire y otra vez…

Veo como se abren mis partes, como se acerca él, siento como la apertura se hace más grande, veo hasta un intento de Tomás por volver dentro pero ya no es momento y sigo empujando hasta ver su cabeza, lo toco y tengo más fuerzas para poder al fin tenerlo, tomo mucho aire  y lo echo con una gran fuerza que lo mueve y lo saca de adentro. ..

Ya te veo, ya te agarro, ya te tengo, ya no te suelto…

Pido el corte tardío de cordón,  me lo dan en cuanto lo sacan y ya puedo olerlo, sentirlo, darle besos…

El milagro de la vida una vez más tengo…

Tomas pesó 3,950 y midió 50 cm, es un gordito precioso y ya estoy loquita por él. ..

Por decir algo más : creo que es muy duro el último mes de embarazo y más duro un parto pero no deja de ser el momento más increíble que puede vivir una mujer… La experiencia más grandiosa que nos ha dado la naturaleza…

 

 

 

 

 

Otro gran día de la madre…

Hoy domingo 7 de mayo vuelvo a festejar un día que fue muy esperado por mí, el día de la madre.

Yo siempre quise serlo y mas teniendo la experiencia de mi madre, que siempre dice que «ha nacido para ser madre» y ha sabido ser una grande.

Me pregunto que podría decir que no haya dicho ya, pero me doy cuenta que con el tiempo siempre vamos cambiando, aunque sea en cosas que casi no se ven, pero que están…

Una de las cosas que más recuerdo de mi infancia es cuando jugaba con mis muñecas siendo su madre, intentando cuidarlas, protegerlas, mimarlas, imaginándome siempre de grande convirtiendo ese papel en una realidad.

Cuando nació mi hermana yo tenía 12 años y para mí era mi bebé, me la llevaba a todas partes y siempre he tenido una relación increíble con ella.

Luego de adolescente soñaba siempre que tenía hijos, eran pequeños/as cositas bellas y dulces llamándome «Mamá»

Cuando seguí creciendo empecé a buscar a una pareja que le gustasen los críos y que quisiera tener niños, yo siempre tuve claro que quería tener al menos tres.

Cuando al fin encontré el hombre de mi vida estuvimos buscando quedar embarazados algo más de un año y no lo conseguíamos, por ser una «cagaprisas» como me dice mi marido busqué una alternativa que me diera una mayor rapidez y seguridad para lograr mi objetivo y me puse en manos de la fertilización asistida: allí primero me dijeron que tenía una hormona llamada fsh de una mujer de 70 años y que nunca me quedaría embarazada, que si eso podía probar la fertilización in vitro pero había que esperar mucho y no me aseguraban nada…

A mí se me vino el mundo abajo: todo lo que había imaginado y soñado no podría ser, pero aunque estaba muy triste, una parte de mí no aceptaba esto como una verdad; por eso, con mi positividad y perseverancia de entonces volví a insistir hasta que dí con otro médico que quiso repetir las pruebas y salieron absolutamente normales. Me pregunto que hubiera pasado si me quedaba con esa sensación tan triste de fracaso, quizás hubiera entrado en una depresión de la que hubiese sido difícil salir…

En el segundo intento me quedé embarazada y eran mellizos: mi niño Tiago y mi niña Luna, ya saben el resto de la historia, los perdí en la semana 20 de embarazo por una infección en la que casi me voy yo también… Yo estaba tan triste que llegué a pensar en dejarme morir para irme con ellos, aunque todos me decían: «Eres joven y fuerte, ya tendrás otros hijos» pero yo no podía aceptar eso porque lo veía como reemplazarlos y ellos eran irremplazables…

Finalmente con mucha ayuda de mi gran marido empecé a superarlo y al poco tiempo me quedé embarazada naturalmente de Samu, mi mayor… Viví ese embarazo con terror de perderle, por el miedo a lo que me había pasado anteriormente pero todo salió estupendamente…

22 meses después llegaba naturalmente Mateo y viví ese embarazo muy nerviosa por no saber cómo podría manejarme con dos, ya que al haber elegido un estilo de crianza natural me resultaba muy complicado brindarme equitativamente con los dos, pero lo logré…

23 meses después llegó Lucas y viví ese embarazo bastante más tranquila, aunque dudaba un poco al pensar de como podría manejarme con tres peques en casa, hasta llegue a hacer lactancia en tritándem, pero como siempre de todo se sale y todo se aprende, volví a salir a flote y me manejo bastante bien…

24 meses después está muy cerca de llegar mi cuarto varón: Tomás y estoy viviendo este embarazo mucho menos preocupada que en los anteriores, aunque me da mucha pena no ser la mamá que era en los primeros embarazos porque les ponía canciones, música clásica, les hablaba,  etc, etc, que ahora me resulta muy complicado o casi imposible teniendo en cuenta que en casa no existe el silencio y es una locura de gritos y ruidos cotidianos…

En fin, después de esta numerosa cronología de mi vida, ésta es mi historia de madre en todos estos años, yo siempre tuve claro que quería serlo.

Muchas veces estoy cansada, agotan mi paciencia, tengo mal humor y me siento mala madre, pero otras miles de veces cuando los veo jugando, saltando, riendo, interaccionando, me doy cuenta que el tiempo pasa muy rápido y hay que disfrutarlos, besarlos, mimarlos y darles todo lo que tenemos y lo que somos. Aunque digan que «los hijos no son nuestros sino de la vida» ellos son mis hijos y yo soy de ellos…

Los amo a cada uno, a los que se fueron, a los que están y al/los que vengan, cada uno es lo más especial y valioso que puede existir, son el tesoro más grande e importante en la vida de esta orgullosísima MAMÁ…

Gracias hijos por existir y por haberme convertido en una madre muy feliz…

¡¡Los adoro bellos de mi vida!!

Día del padre 6.0

Buenas, hoy como todos los años dejo este espacio a mi marido para que escriba en su día…Aunque miedo me da porque hoy no ha sido un día del padre ejemplar, los niños la han liado mucho…Pero no siempre tenemos que mostrar sólo lo bonito de ser padre, muchas veces la realidad  y el desastre cotidiano nos supera…:0

 

Sexto día del padre que vivo como tal y sexto post que escribo en este blog.

Somos familia numerosa de cinco miembros y a punto de ser 6. La gente se pregunta si estamos locos, pero yo eso ni me lo planteo, la respuesta es obvia, SI.

Todo es muy bonito y maravilloso, pero no es tan de color de rosa como puede parecer. Los niños están constantemente liándola y rompiendo cosas, vamos que se va un presupuesto en resolver y arreglar sus trastadas. El sofá, el coche, moviles, ordenadores y cualquier otra cosa que esté a su alcance corre un serio peligro, y con ello la gran duda cada vez que rompen algo… ¿Lo reemplazo, lo arreglo o prescindimos de ello hasta que tengan edad para cuidar las cosas? (arreglarlo supone una inversión de tiempo del que no disponemos y reemplazarlo una inversión económica que con la cantidad de destrozos que hacen es dificil de asumir) . En este caso he llegado a una conclusión, lo que no sea imprenscindible se tira a la basura y no se reemplaza hasta que sean mayores, con esto ganas espacio en casa y tranquilidad (una cosa menos de la que tienes que estar pendiente), lo que sea imprescindible o bien se arregla gastando el mínimo de tiempo y energía o se sustituye por algo viejo que, aunque lo vuelvan a romper, no suponga un nuevo disgusto. En definitiva, cuando tienes tantos niños pequeños (y cuando no) lo mejor es tener la casa lo mas vacía posible, un coche viejo (pero seguro) y sobre todo paciencia, mucha paciencia. De todas formas y aunque no paren de liarla… Se les quiere igual…

Hasta el año que viene (si no me rompen el ordenador)…

 

Lo he dicho, mi marido estaba centrado en el enojo, así que no estaba precisamente inspirado para escribir, pero lo hemos festejado ayer y fue un día estupendo, ya os contaré…

Gracias por estar ahí…;)

 

Mis razones para tener hijos…

«¿Otro más?, ¿Estás otra vez embarazada?, ¿Porqué tienes tantos hijos? ¿Eres del opus? ¿Eres ultra religiosa? o «tendrás mucho dinero porque mantenerlos cuesta una fortuna»…

Estas y otras frases son las que escucho a diario cuando la gente descubre que estoy esperando a mi cuarto varón, todos se sorprenden y ninguno lo entiende, cosa que me cabrea y mucho.

Hasta un señor del mercadillo me preguntó que porque me llenaba de hijos, con qué necesidad…

A veces me dan tanta rabia estas preguntas que me dan ganas de responder cualquier barbaridad, como que me gusta mucho el sexo, que me encanta coleccionar muñecos o la maldad que se me ocurra en el momento, pero siempre me frustro porque me quedo con las ganas de decirles algo y me lo callo y me encuentro a mi misma dando explicaciones a gente tonta y desconocida.

¿Porqué molesta una decisión personal mía, porque se mete la gente donde no debe?

Supongo que porque no es lo habitual, en un país donde la media es de 1,3 por parejas no es esperable algo tan diferente, lo que no quiere decir que no sea normal.embarazada

Sinceramente a mí me encanta ser mamá, me encantan los niños y estar embarazada, me fascina comprobar una y otra vez la vida que se gesta dentro de mí, sentir sus movimientos y después de unos meses maravillosos ver salir una personita de mí, como pasa de ser tan indefenso y dependiente a tener su propia personalidad y brillar por ser tan único e irrepetible, observar cómo crecen, aprenden todo…

No tenemos mucho dinero, somos una pareja normal y sólo trabaja mi marido para que yo pueda quedarme a criar a mis hijos en los primeros años de vida que es cuando más me necesitan. No nos damos grandes lujos porque en vez de logros materiales preferimos espirituales, de esos que llenan el corazón.

Además, no es tanto más caro tener más hijos, en nuestro caso al ser todos niños se van pasando la ropa y los juguetes de uno a otro sin problemas y casi nunca tenemos que comprar cosas nuevas porque todo se reutiliza.

Solemos comprarle más ropa al mayor y se la van pasando, porque al crecer tan rápido la ropa nunca se desgasta tanto. La comida en España es barata, (soy experta en ofertas, me conozco los precios de cada producto en cada super); y comemos de todo, aunque los peques comen muy poco todavía…

Por ser familia numerosa tenemos también algunos descuentos aunque muy pocos, pero todo sirve…

En fin, que no es tan caro ni hay que tener demasiado dinero sino saber cómo organizarse, porque yo creo que si yo trabajara me saldría más caro llevar a los nenes con extraescolares y comedor y al peque (o próximamente los peques) a la guardería, que estar en casa con ellos, (los mayores solo van al cole 5 horas por jornada intensiva).mamagallinaysuspollitos

Somos una gran familia y nos consideramos felices.

Me gusta tener hijos.

Además, también creo que con cada embarazo intento reparar lo que ocurrió en el primero, (pérdida de mellizos en la semana 20) ya que desde ahí dijimos que los bebés que quieran venir serían bienvenidos…

No por eso voy a ser una coneja y buscar gestar un hijo en cada ocasión, pero yo vengo de una familia numerosa y quiero muchísimo a mis hermanos, así que también quería que nuestros hijos los tengan.

«Me imagino que ya no irás a por la niña « es el otro comentario que me dicen y digo no, pero porque no voy buscando un trofeo sino formando seres humanos únicos e irrepetibles.

Amo a mis hijos y ellos a mí, amo a mi esposo y él a mí, ¿qué más podría pedir?

Tal como cantaba Alaska: …«A quién le importa lo que yo haga, a quién le importa lo que yo diga, yo soy así , así seguiré, nunca cambiaré»…

 

 

24 semanas de embarazo

Hola!! hoy acabo de cumplir al fin las 24 semanas de embarazo…

Esperaba mucho este día porque  se supone que aquí está el límite. A partir de esta semana o de cuando el bebé pesa medio kilo si surgiera cualquier inconveniente y naciera, ya es apto para la vida. Antes de esta semana es muy difícil que sobreviva…

Esta semana es quizás la que más espero en mis embarazos porque me trae consigo un recuerdo terrible e inolvidable de hace más de 6 años: cuando perdí a mis mellizos yo estaba de 20 semanas y esperaba que me asegurasen que tendrían alguna posibilidad de sobrevivir pero muchos médicos coincidieron en que esa posibilidad se iniciaba en la semana 24 porque antes era imposible. Y yo pensaba: «sólo 4 semanas más, el límite de la vida o la muerte se establecía allí»…Por eso es tan relevante esta semana para mí.tomas

…Estoy muy feliz, ayer fuimos a hacer otra eco 5d y pude al fin ver su carita, me enamoré perdidamente al ver como se reía, bostezaba, se chupaba el dedo… Verlo en directo, saber que es tan real, la vida me parece increíble, jamás dejo de sorprenderme con cada embarazo, saber que sigue formándose dentro de mí y luego ver esos bichitos tan lindos en los que se convierten, sigue siendo un milagro, el más bello de la vida…

Y el supuesto inconveniente que tenía, lo de la placenta parece que ya va subiendo, así que ¡muy bien Tomás! parece que todo va a ir estupendamente…

Así que acabo de entrar en el sexto mes y estoy contenta, tener cuatro hijos es una multitud pero también será una multitud de alegrías las que traerán. ¡Me encanta ser parte de esta gran familia!

Donde caben 3, caben 4…

Es exactamente como piensan. Estoy nuevamente embarazada.

Hace mucho que quería contarlo pero cuesta encontrar tiempo para escribir tranquila. Estoy de 15 semanas.

Casi todo el que se ha enterado me pregunta porqué, si estoy loca, si no utilicé métodos anticonceptivos y yo respondo que sí, que estoy loca, que no utilicé nada y que fue buscado, ante lo cual la gente se sorprende  porque no entienden que queramos formar una gran familia.

Entonces es cuando llegan las otras preguntas clásicas: ¿eres del opus? ¿testigo de jehová? etc… Y mi negativa y sorpresa ante estas preguntas reiterativas, donde se nota que la gente busca encasillarnos al salirnos un poco de los patrones habituales…dondecaben3

Estoy estupendamente, no veo la hora de comenzar a sentir sus pataditas porque como no tengo síntomas de nada, (jamás un vomito, nauseas, nada) solo veo mi barriga crecer…

Es un niño, ya lo sé. Se llamará Tomás.

Me dieron la noticia en la semana 12 y en la 13 y 14, tres confirmaciones de ginecólogos distintos necesité para asegurarme. La verdad es que yo tenía ilusión de que fuera niña y cuando me lo dijeron por primera vez sentí decepción y mucha culpa y enfado conmigo misma por sentirme así. Hasta que pocos días después comprendí que yo ya soy una experta en criar varones, no hay que volver a comprar nada porque todo se reutiliza y que sigo siendo la reina de la casa, como me dice mi marido.

Los niños son más de la mamá por eso del Edipo y a mi eso me encanta. Porque se la pasan dándome besos, dibujos, abrazos y palabras bonitas y no quiero prescindir de esto jamás…

El único problema real que le veo es cuando tenga 4 nueras, ¡Dios mío! tendrán que ser perfectas para estar con mis hijos, ¡¡¡jajaja!!! Seré una suegra jodida, así lo veo… 😉

En fin, no quería que pase más tiempo sin contarlo.

Me encantan las familias numerosas porque yo vengo de una y aunque sea una locura total, tener otro hijo es maravilloso.stop

Samu se puso feliz, Mateo no quería saber nada aunque ahora ya se adaptó a la idea y Lucas aún no lo entiende… Ni quiero imaginar cómo se pondrá al perder el reinado :0

Será difícil, mas que nada en los primeros dos años como ya nos ha pasado, pero estamos acostumbrados, así que sabemos lo que hay y lo que vendrá. Si en tantas familias han podido hacerlo, ¿porque no nosotros?

Tomy, eres bienvenido y estamos felices de tenerte con nosotros…

 

Actualizando blog…

Buenas, no me echen la bronca porque últimamente apenas tengo tiempo.

Los nenes han estado malitos,  primero uno, luego el otro, así siempre; parece que los virus no me dan respiro.

Además, estoy estudiando. Sólo me he matriculado en dos asignaturas pero es imposible poder estudiar.  Me quedan unos días para examinarme pero apenas llego a leer superficialmente, así que espero que dependa más de la suerte que de mi conocimiento,  ¡¡jeje!

Realmente es muy complicado compaginar la crianza con el estudio.  Hay gente que me dice que estoy loca por pretender estudiar teniendo tres peques pero sigue siendo mi meta y al menos quiero acercarme un poco…defiesta

Lucas ha cumplido su primer año,  el tiempo pasa volando. Ya le queda poco para andar aunque aún no se suelta y está terrible,  se la pasa liandola y ha aprendido a decir montones de palabras, ¡está para comérselo!

Mateo ha cumplido 3 años y aunque sigue siendo un pequeñín lo veo mucho más mayor,  esta todo el día jugando y armando torres con todo lo que encuentra en su camino, es inseparable con Samu aunque pelea mucho a Lucas porque el peque le coge y tira a cada momento lo que a Mateo le cuesta construir…

Y Samu está tan grande que se la pasa haciendo preguntas de mayores y exige respuestas afines, quiere saber los porqués de todo y no se conforma con respuestas simples. Y yo se lo cuento todo.

Mis días son una locura, mi casa un desastre, pero tengo tres soles que me iluminan cada día y no los cambiaría por nada. Así que aunque el tiempo no me alcance y a veces todo parezca un caos, igual soy feliz.

Tengo a mi amor que es un gran hombre, marido y papá y a mis príncipes que cada día me hacen sonreír. No puedo pedir más.  Lo demás puede esperar.

Como dice la letra de una canción: ¡gracias a la vida que me ha dado tanto!

Día del padre

Buenas, como todos los años hoy, que es un día tan especial para los papás, es el momento que mi marido escriba en el blog, así que le cedo este espacio…

 

…Un nuevo día del padre y como todos los años aquí estoy, poniendo mi granito de arena en este gran libro de recuerdos. Es ya la quinta vez que escribo como padre, aunque también es la primera que lo hago como padre de familia numerosa.

Ya han pasado cinco años, qué rápido se dice… Parece que fue ayer cuando recibimos ese primer regalo llamado Samuel, y que fue hace solo unas horas cuando llegó el segundo, de nombre Mateo, y parece que solo hace un ratito que nació Lucas, que con solo 10 meses ya ha sabido despertar en mí un amor sin fecha de caducidad.20160319_181515

Cinco años, un lustro, cuantas cosas han pasado en este tiempo, la mayor parte de ellas buenas. Echando la vista atrás, son tantas y tan diversas las vivencias y los recuerdos… Tantas noches sin dormir, tantas risas, tantos sustos y tantas cosas…

Ahora miro a mi alrededor y veo a mi Bandix, con casi cinco añitos, y tomo conciencia de la inexorabilidad del tiempo. 20160319_181424

Veo a ese niño vivaracho, inteligente y encantador, a veces un poco caprichoso, y me doy cuenta de que nunca volverá a ser el bebé que tenía en brazos hace cuatro días y que recitaba los sonidos de los animales como si de una lección de ciencias se tratase. También me doy cuenta de que pronto dejará de ser este pequeño genio de cinco años y se convertirá en un adolescente y luego en un adulto… Y yo, que echo de menos al Samuel bebé… Echaré de menos al Samuel niño, y al Samuel adolescente. Pero igual que ahora disfruto al Samuel niño… También disfrutaré a mis bichos en todas sus etapas.20160319_161017

Antes de despedirme hasta el próximo 19 de marzo me gustaría decir que ser familia numerosa es algo más que noches sin dormir, locura, trabajo y mas trabajo. Es sobre todo unidad, esperanza, juego, aprendizaje, alegría y mas alegría.

Desde aquí quiero agradecer a mis tres retoños, Samuel, Mateo y Lucas todos los grandes momentos que me han regalado durante estos casi cinco años, a mi mujer por haberme regalado esta vida (y por soportarme), a mi padre por haberme enseñado a amar y ser mas justo, y como no, felicitar a todos los padres y animarlos a disfrutar cada instante con sus hijos, porque cada momento y cada situación son irrepetibles y nunca volverán.

Vicen

Anteriores Entradas antiguas