Día del padre

Buenas, como todos los años hoy, que es un día tan especial para los papás, es el momento que mi marido escriba en el blog, así que le cedo este espacio…

 

…Un nuevo día del padre y como todos los años aquí estoy, poniendo mi granito de arena en este gran libro de recuerdos. Es ya la quinta vez que escribo como padre, aunque también es la primera que lo hago como padre de familia numerosa.

Ya han pasado cinco años, qué rápido se dice… Parece que fue ayer cuando recibimos ese primer regalo llamado Samuel, y que fue hace solo unas horas cuando llegó el segundo, de nombre Mateo, y parece que solo hace un ratito que nació Lucas, que con solo 10 meses ya ha sabido despertar en mí un amor sin fecha de caducidad.20160319_181515

Cinco años, un lustro, cuantas cosas han pasado en este tiempo, la mayor parte de ellas buenas. Echando la vista atrás, son tantas y tan diversas las vivencias y los recuerdos… Tantas noches sin dormir, tantas risas, tantos sustos y tantas cosas…

Ahora miro a mi alrededor y veo a mi Bandix, con casi cinco añitos, y tomo conciencia de la inexorabilidad del tiempo. 20160319_181424

Veo a ese niño vivaracho, inteligente y encantador, a veces un poco caprichoso, y me doy cuenta de que nunca volverá a ser el bebé que tenía en brazos hace cuatro días y que recitaba los sonidos de los animales como si de una lección de ciencias se tratase. También me doy cuenta de que pronto dejará de ser este pequeño genio de cinco años y se convertirá en un adolescente y luego en un adulto… Y yo, que echo de menos al Samuel bebé… Echaré de menos al Samuel niño, y al Samuel adolescente. Pero igual que ahora disfruto al Samuel niño… También disfrutaré a mis bichos en todas sus etapas.20160319_161017

Antes de despedirme hasta el próximo 19 de marzo me gustaría decir que ser familia numerosa es algo más que noches sin dormir, locura, trabajo y mas trabajo. Es sobre todo unidad, esperanza, juego, aprendizaje, alegría y mas alegría.

Desde aquí quiero agradecer a mis tres retoños, Samuel, Mateo y Lucas todos los grandes momentos que me han regalado durante estos casi cinco años, a mi mujer por haberme regalado esta vida (y por soportarme), a mi padre por haberme enseñado a amar y ser mas justo, y como no, felicitar a todos los padres y animarlos a disfrutar cada instante con sus hijos, porque cada momento y cada situación son irrepetibles y nunca volverán.

Vicen

Día del padre

Buenas! como ya es tradición, éste es el tercer año que invito a mi marido a escribir una pequeña reflexión por este día. Les dejo con el mejor padre del mundo, ¡¡jeje!!

Un nuevo día del padre y un nuevo post en este entrañable blog.

Como los anteriores este día es también especial. Es especial por muchas cosas, pero sobre todo porque estamos esperando un nuevo integrante de la familia. ¡Vamos a ser familia numerosa! Se dice muy rápido pero se digiere muy lento.

Llegados a este punto merece la pena preguntarse qué significa ser familia numerosa y qué implicaciones tiene. Ser familia numerosa no significa descuentos en los viajes ni reducción de impuestos, va mucho mas allá. Es una apuesta por la familia, por el hogar, por el amor a los tuyos, por la vida y por todas esas maravillosas cosas que estamos viviendo desde que somos padres y que nos han llevado a crecer no sólo cuantitativamente sino también cualitativamente, que nos han ayudado a aprender a valorar lo realmente importante, a querer a cada uno como es, a valorar las diferencias porque ellas son las que nos hacen especiales, a convivir, a amarnos y a respetarnos a nosotros mismos y a los demás.

Cierto es que también implica algunas renuncias como tener menos tiempo para uno mismo (con dos hijos el tiempo libre es cero, con tres… ¿Será menos de cero?); aplazar el crecimiento profesional (¿Hay prisa por adquirir más responsabilidades y pasar más horas en la oficina? Creo que puede esperar), perder intimidad (mejor bien acompañado que solo)…

Seguramente habrá muchas mas cosas a las que hemos tenido que renunciar, pero ahora ni me acuerdo y mirando a mis chiquitines estoy mas seguro que nunca de que todas pueden esperar.

Muchos pensaran que estamos locos, aquí, solos, sin familia que nos eche una mano, con un solo sueldo, en plena crisis y en un mundo cada vez mas complicado… Y tal vez tengan razón.

Estamos locos, locos de atar.

Locos por nuestros hijos, por esas cosas pequeñas que corren por ahí tirando todo lo que se encuentran por delante, por esos gritos que nos ponen la cabeza como un bombo pero que a la vez inundan de alegría cada rincón de la casa, locos por esas noches interminables y por las preguntas incómodas. Locos , por los paseos por el parque, por el zoo y por los helados…

Locos por Samuel, por Mateo y por Lucas. Sí, estamos locos, muy locos, pero es una locura que nos llena de felicidad…

Pronto seremos cinco en casa y quien sabe… Tal vez algún día seamos más. Le hemos cogido el gusto a esto de tener niños y no renunciamos a nada porque podemos con todo y sobre todo…

Porque estamos muy locos. ¡Bendita locura!