Ya sé que a muchos padres no les gustará este post, y lo siento si ataco la sensibilidad de alguien pero la frase que he puesto en el titulo me parece tan real como la vida misma…
Ya dije que lo había leído por ahí en un post que encontré en internet, pero no creí que fuera tan cierto como hasta ahora.
Samu ha ido 4 días a la guarde y ya se cogió el primer virus: una tremenda gripe con fiebre que llegó a los 40º y que desencadenó en unas horribles aftas bucales que no le permiten comer y casi ni tomar la teta, (creo que se llama algo así como «estomatitis aftosa»). LLevamos desde el sábado con Samu malito. Y hemos ido a su pediatra dos veces y a urgencias del hospital, jamás lo habíamos visto así, tan caído, sin fuerzas, sin ganas de nada, con carita triste; en fin, todo el mundo me dice que eso es lo normal, que todos los niños están con mocos, que todos se enferman en la guarde, que ésa es la forma para que luego se inmunicen…
En fin, no me creo nada de esto.
He buscado mucha información para asegurarme que lo que digo y defiendo es cierto y parece que en el primer año en una escuela infantil, el 80% de los niños se cogen la mayoría de los virus que están allí esparcidos; se lo pasan malos casi todo el año y recién en el segundo año esto disminuye a la mitad para en el tercer año ser de solo un 15-20%
Me pregunto: ¿realmente creen que ésto es lo normal?, ¿Pero no hemos salido adelante toda nuestra generación sin haber ido a la guardería y estando enfermos muy de vez en cuando?
Además, sólo en el tema de la gripe hay miles de mutaciones, o sea que si cogen una no la vuelven a coger, pero aún le quedarían todas las otras miles que sí puede, por lo tanto es imposible la inmunización total.
Me pregunto: ¿es realmente necesario hacerle esto a nuestros hijos?
Y respondo otra frase que he leído y comparto: «La guardería es una necesidad de los padres, pero nunca de los niños».
Además, yo misma he visto como profesionales de la educación le limpiaban los mocos con el mismo pañuelo a un bebé que a otro, por lo que estarían promoviendo el contagio de los virus.
Ya sé que de todas formas al chupar el mismo juguete, estornudarse encima, etc quizás lo cogerían de todos modos pero nunca está de más tener un poco de precaución al respecto, que a veces es tan simple como lavarse las manos o echarse unas gotas de alcohol para intentar prevenirlo.
En fin, el pobre de Samu lleva casi una semana malito, aunque ahora está mejor, pero gracias a que le ocurrió esto pudimos terminar de darnos cuenta que lo mejor es esperar más tiempo: el pediatra de urgencias nos dijo que hasta los 18 meses los niños tenían su sistema inmune muy inmaduro, pero a partir de entonces empieza a fortalecerse. Así que aún no sé cuánto tiempo más me cogeré de excedencia, pero prefiero mil veces no tener dinero para darme un tonto capricho y en cambio compartir tiempo y salud con mi hijo.