Crónica de mi parto

¡Buenas, queridos seguidores!

Hoy es 26 de mayo del 2017. Estoy en mi 38+5 y hace una hora he entrado en paritorio. A ver si llego a contarlo todo antes que venga Tomás …

El domingo pasado tenia mucho flujo y me sentía como mojada, así que me hice un test casero, (llamado «All sense») que detecta perdidas de liquido amniótico y salió una pequeña marca azul que supuestamente significaba positivo. Por lo que fui a urgencias para que me confirmarán o no el tema. Después de 2 amnisures , (test que utilizan en los hospitales por el mismo tema), ecografía,  monitores y dos exploraciones dolorosas el resultado fue negativo, así que me enviaron a casa.

Supuestamente el líquido estaba bien, (he de decir que la exploración me dolió mucho y pensé que podrían haberme realizado la maniobra de Hamilton sin decirme nada al verme tan apurada y ansiosa por tenerlo)…

El miércoles siguiente fui a mi ginecólogo particular y le pregunte acerca de dicha maniobra habiéndome asegurado la noche anterior de informarme y leer absolutamente todo al respecto.

El me lo había hecho con Samuel, así que me exploró,  y me dijo que el bebé ya pesaba 4 kilos y que eso era simplemente una ayuda para acelerar las contracciones y el trabajo de parto, así que por mi cabeza loca que nunca he aprendido a esperar, le dije que me lo haga. Me dolió bastante y al irme más,  tuve contracciones dolorosas pero no suficientes como para volver a urgencias.

Además desde el lunes pasado, justo al día siguiente de la exploración en el hospital, empece a echar el tapón mucoso y el tema es que no había parado de echarlo hasta hoy. Cada vez era más cantidad, mezclado con algo de sangre y cierto dolor de regla, así que volví a urgencias.

En cuanto me exploraron y volvieron a hacer el amnisure dio positivo, la fisura en la bolsa estaba confirmada…

Saberlo me dio una angustia tremenda por temor a que ocurra algo malo, (con Mateo me había pasado).

Me ingresaron y lo de siempre: antibiótico de alto espectro: (augmentine), por riesgo de infección, paritorio para intentar dilatar, rotura de bolsa a las 15hs y goteo de oxitocina…

Empieza el dolor…

Me conozco todo esto de memoria, comienzo sonriendo y luego termino pidiendo a gritos que me lo saquen, mi cara va haciendo una transformación hasta que doy miedo, ja ja ja! !

Son las 16:03, las contracciones son cada vez más seguidas y siento el líquido caliente que no para de salir…

Otra vez toca inducción y solo siento culpa por no haber sabido esperar, pero por otra parte ya es hora de poder conocer, abrazar y ver a mi niño.

Poder ponerle cara al fin y tenerlo entre mis brazos. ..

..16:50 hs Las contracciones son cada vez más fuertes y seguidas, según el monitor han llegado al 117 y ¡cada 5 minutos! Mi cara ha empezado a cambiar, de relajada casi sonriente a cara de jodida por el dolor…

17:30 malditas contracciones, son cada 2 minutos y llegan hasta 127 , voy a pedir la epidural, no tiene sentido aguantar el dolor, este invento es para que las mujeres no sufran y  yo no tengo porque ser masoquista. ..

La anestesista me puso la epidural a las 17:55, gracias a Dios no pasó lo de cuando nació Lucas, (me pincharon un vaso y la anestesia se estaba yendo al torrente sanguíneo), todo ha ido bien así que ahora toca relajarme y esperar…

1845: así Sí que mola , ya no duele nada y siento que el bebé va bajando…Aunque me han explorado y sigo con 3 cm pero el cuello está blando…

1930: siento la cabeza del bebé acercarse a la salida, siento la estrechez y la dureza, se va acercando a la meta… Me exploran y…¡estoy completa!

¡Ya es hora de conocerte pequeño!

Traen un espejo gigante para que yo vea mi propio parto, comienzo a tomar respiración y a empujar, me agarro con fuerzas a la silla de parir y pongo todas mis fuerzas hasta que se me termina el aliento,  vuelvo a coger aire y otra vez…

Veo como se abren mis partes, como se acerca él, siento como la apertura se hace más grande, veo hasta un intento de Tomás por volver dentro pero ya no es momento y sigo empujando hasta ver su cabeza, lo toco y tengo más fuerzas para poder al fin tenerlo, tomo mucho aire  y lo echo con una gran fuerza que lo mueve y lo saca de adentro. ..

Ya te veo, ya te agarro, ya te tengo, ya no te suelto…

Pido el corte tardío de cordón,  me lo dan en cuanto lo sacan y ya puedo olerlo, sentirlo, darle besos…

El milagro de la vida una vez más tengo…

Tomas pesó 3,950 y midió 50 cm, es un gordito precioso y ya estoy loquita por él. ..

Por decir algo más : creo que es muy duro el último mes de embarazo y más duro un parto pero no deja de ser el momento más increíble que puede vivir una mujer… La experiencia más grandiosa que nos ha dado la naturaleza…

 

 

 

 

 

Y llegó el gran momento: mi parto

Voy a hablar del expulsivo, que es en sí el gran momento. Lo tengo grabado, ya que había una matrona muy maja que nos dejó inmortalizar ese instante  y me encantaría ponerlo aquí en el blog, no me da vergüenza ninguna ya que un suceso así es digno de compartir, pero por el momento y por temas de seguridad e intimidad personal me lo voy a pensar.

17/5/13, 19 hs:  Mateo nació en 5 minutos, fue impresionante. Mientras estaba saliendo, me dejaron tocarle la cabeza y fue increíble. Es una maravilla, una verdadera pasada, no hay palabras con las que se pueda contar con exactitud las sensaciones de ese momento, aunque intentaré describir lo que se me pasaba por la cabeza en esos segundos cruciales: cuando vinieron a decirme que ya había llegado el momento se te pasan mil cosas: «va a nacer mi hijo, otra vida que viene, que va a llenarlo todo con su presencia»; ¿vendrá bien?, ¿estará sano? ¿podrá salir o tendrán que hacerme cesárea?, ¿Cómo será su cara?, millones de preguntas, dudas, preocupaciones y todo mientras intentas pujar, coordinándolo con una contracción, (de la respiración ni hablar, lo haces como puedes, no recuerdas nada de las clases de preparación al parto, pero te sale bien igual). Todo se mezcla en ese instante, hay nervios, mucha emoción, sientes alivio pensando que ya ha llegado ¡al fin! el momento, un popurri de tantas cosas…mateo01

Y cuando empieza a salir, notas que una parte de tu propio cuerpo está saliendo de tí, lo sientes como algo tuyo, como que te estás partiendo en dos, y una vida está saliendo de tu interior.

El dolor, la fuerza, la tensión que sientes cuando empujas y él empieza a salir… Mi marido y la matrona diciendo ¡¡¡¡¡ahí viene, ahí viene, ahí está, ya lo veo, ya salió!!!!

Sólo tuve que empujar algunas veces, pero después él mismo me ayudaba e iba saliendo solo, para mí lo más impresionante es el momento que sale el cuerpo, porque es como que tu propio cuerpo se divide, es cuando más fuerzas tienes que hacer y son segundos de sentir que no puedes más y que te estás partiendo en pedazos para luego ver cómo lo sacan de tí y te lo ponen en tus brazos.

Fue increíble, realmente increíble, ojalá pudiera hacerles sentir lo vivido en esos instantes; porque después del dolor, de los nervios, de lo difícil de ese momento llega la paz, el sosiego, la emoción , la ternura, la alegría de tener a tu hijo en tu pecho.

Enseguida me lo pusieron encima y le hicieron las pruebas piel con piel conmigo y todo perfecto.mateo00

Mateo nació a las 16:42 hs, peso 2.975 grs y midio 47 cm.

Tuve un desgarrito de nada y solo me tuvieron que dar un punto.

Lloró poco y le costaba ponerse al pecho. En las dos horas que te dejan a solas con él no comprendía cómo podía ser tan pequeño, mi pezón no entraba en su diminuta boca, no sabía ni cómo cogerlo, parecíamos primerizos, ni siquiera me acordaba cómo había hecho con Samu, era un volver a empezar, todo otra vez, de nuevo…

Dijeron que había sido «un parto limpio» y hasta la matrona me pidió el vídeo del nacimiento. Todo estuvo muy bien y fueron encantadores con nosotros.

Ya nos sentíamos una «familia completa», ya eramos 4, estuve muy feliz porque mi marido pudo estar conmigo en esos momentos…

Y aquí lo malo, Mateo tenía un quejido y llanto constante que preocupaba un poco y no podía prenderse a la teta, por eso después de estar 3 horas conmigo, decidieron llevarlo a revisar y dejarlo en la incubadora «unas horas» a ver que tal evolucionaba. Pero eso ya corresponde al próximo post…Este prefiero dejarlo aquí, con la emoción hecha carne vivida en esos momentos…

Cuando nace un hijo…

Encontré esto hace mucho por algún lugar que no recuerdo, lo había guardado y quería compartirlo, ya que cada vez falta menos para conocer a mi otro principito…

Al nacer… Mis oídos escucharán tus quejidos;
perdóname mamita por tus dolores.
Serán la mágica palpitación de la esperanza
Y la comunicación más íntima de nuestro amor.
¡Puja mamá, que estaré naciendo!
¡Sentiré temor!… ¡Pero no desfallezcas!
¡Puja mamita! Puja con toda tu fuerza
y con todo tu amor
Puja y puja , hasta sentir mis propios latidos
hasta que escuches el llanto de mi vida.

parto

Y cuando corten el cordón!… Estaré desvalido

Me golpearán y yo no sabré porqué

Pero habré conocido tu natural fisonomía,
nuestras miradas se habrán acariciado.
Y habré de vivir mi propia experiencia
al llegar al éxtasis de la creación
Dios me dejará disfrutar de la vida
Déjame tú mamita…
disfrutar de tus manantiales
Sacia mi hambre
con el néctar de tu cuerpo y de tu corazón.parto2
Gracias mamita por darme tu sangre,
Por hacer de tu cuerpo mi casita,
durante estos nueve meses
que no han sido fáciles para ninguno de los dos
pero dime mamita…
¿verdad que ha sido maravilloso …
…estar así tan unidos los dos?
Gracias Dios por enviarme a la vida…
Gracias mamita, por aceptar mi llegada
Y por haber sido tú… un instrumento de Dios…