Hace unos días, alguien muy cercano dijo que «no pensaba tener más hijos porque no quería que le corten la libertad» y me dejó pensando…
Pensé en las implicaciones de tener un hijo, tanto las ventajas, como las desventajas, (si las hubiera y si se pueden llamar así) y llegué a varias conclusiones:
-Cuando uno tiene un hijo, dejas de pensar en tí, (y en muchos otros, jeje!), porque tu hijo pasa a ser lo más importante de tu vida, el motivo por el que te levantas cada día con una sonrisa, dejas de ocuparte de ti misma, el egoísmo y la vanidad pasan a último plano y te preocupas y te ocupas con toda el alma, cuerpo, corazón y mente de ese ser tan pequeñito que te reclama constantemente.
-Respecto a que «corta la libertad», creo que es una libertad que no es el verdadero concepto en sí, digamos que temporalmente se terminan muchas salidas que no puedes hacer con un bebé, (ir al cine, salir a bailar, o estar de copas), esas cosas, pero empieza otro concepto de libertad porque te cambia completamente la forma de pensar y salir a dar un paseo en familia también significa un nuevo estilo de libertad desconocido hasta el momento pero igual o mas bonito… La libertad es todo lo que uno haga voluntariamente, porque cada uno tiene el derecho a elegir sobre cada cosa que hace. Por eso se puede uno sentir prisionero sin haber tenido hijos y sentir libre teniendo una gran familia…
-Una contra: los miedos. Para mí, esto es lo peor, porque vayas donde vayas y estés donde estés, siempre aparecen y la gran mayoría de las veces son irracionales, pero es muy difícil controlarlos, porque a veces son ellos los que te controlan a ti. Por ejemplo, ahora, embarazada y con un niño pequeño me da cada vez más miedo viajar, pero si dejara que me maneje el miedo, ya no podría ir a ninguna parte. No se puede tener a nuestros niños en una burbuja. ¡¡Lo digo y me lo afirmo, a ver si así me lo creo, jejeje!!
-Y el tiempo: se vuelve relativo. No te alcanzan las 24 horas del día para dedicárselas todas y más a tu hijo, nunca te alcanza; cuando es pequeño es practicamente imposible poder hacer más cosas que cuidarlo y estar pendiente de él a cada minuto. Además, si tienes que irte donde sea y quedas a una hora, es imposible cumplir, porque «desde que ensillas hasta que montas» es muy variable; por ejemplo, a Samu cada vez que vamos a salir se le ocurre hacer caquita o dormirse, así que es complicado…
-Un hijo implica darse, brindarse, darlo todo y que si en cualquier momento corriera peligro, serías la primera leona en intentar salvarlo luchando con todas las garras o en dejarte morir, para que él viva, tu vida misma pasa a un segundo plano, porque él es tan importante que está por encima de todo.
-Un hijo implica que te cambie la vida por completo, que te sientas llena, completa y realizada, aunque no practiques tu formación ni tengas grandes oportunidades económicas o materiales, porque todo lo demás es solo una pequeña parte en relación a lo que significa tu hijo.
-Un hijo implica gastos, pero no exagerados como mucha gente cree, además, donde hay dos comen tres. De todas formas si no se tienen hijos seguro que se utilizaría el mismo dinero para cosas superfluas, por lo que es preferible utilizarlo en criar una vida, ¿no?
-Un hijo es lo más de lo más, lo máximo, el más puro amor, e implica, por sobre todas las cosas, abrir el corazón, entregar todo el amor y recibir a cambio sonrisas, ternura, travesuras, besos llenos de chocolate, mimos, mil abrazos buscando protección cuando llora, sabiendo que tú eres su héroe…
Y me pregunto: si un hijo implica todo eso, ¿qué implicarán dos? En un tiempo les contaré, pero por sobre todas las cosas quiero decir que estoy muy feliz de ser mamá…