Tiempo cero

¿Qué significa el título de este post? Pues eso, que no tengo nada de tiempo, que 24 horas son un rato, que el día no me alcanza, que todas las semanas ruego que llegue el viernes para tener más tiempo a mi marido, que tres peques son muchos y que hay muchas veces en las que no puedo mas…

Hacía mucho tiempo que no escribía y no es por falta de ganas. Recién ahora me estoy adaptando a la situación de familia numerosa. Ya no me quejo a diario.

Es verdad que tres peques son una bendición. Es cierto que el amor se multiplica y se los quiere a los tres infinitamente por igual. Pero también es real que la atención no puedo repartirla a partes iguales. Lucas, el bebé, ocupa una gran parte de la atención, casi el cien por cien y si queda un poco hay que repartirlo entre Samu y Mateo.tiempo2

Ya apenas juego con ellos, no tengo tiempo. Sé lo importante que es e intento muchas veces darle al peque a mi marido para hacer algo con ellos pero casi siempre llora, se enfada y lo único que le calma es la teta. Lucas tampoco me ha salido tranquilo y dispongo de su único calmante.

Lo tengo en brazos absolutamente todo el día, ya es otra parte mía porque no me muevo si no es con él. Me siento en falta con mis otros hijos, pero no encuentro la forma de poder hacerlo diferente.

Pero gracias a Dios tengo a Vicen. Él se ocupa mucho de los más grandes. Apenas llega de trabajar los lleva al parque, los baña y se va a dormir con ellos para que yo pueda  ocuparme de Lucas  por la noche. Aún así me siento mal, pero no veo que exista otra forma de hacerlo.

Aún toman teta, los tres. Samu ya apenas me pide, a veces cuando tiene mucho sueño, pero comprende que su hermano pequeño la necesita más que él, al no poder comer otra cosa. faltatiempo

Mateo me pide dos o tres veces por día, pero se enfada mucho si me niego o le pongo excusas. Es complicado coordinarlos, además una la dejo exclusiva para Lucas y la otra la comparten los dos, ¡debería ponerme una tercera, jajajaa! y ya que está otras manos y piernas, así puedo hacer más cosas, jejeje…

La casa esta desastrosa, no hay más tiempo. Los fines de semana limpiamos y ordenamos lo que podemos, pero a veces estamos todos tan cansados que nos apetece más salir por ahi en familia en vez de estar encerrados en casa. Hemos pensado contratar a alguien para que nos ayude un poco, pero damos vueltas y no nos decidimos, soy un poco reticente a la hora de meter alguien desconocido en casa… Aunque reconozco que necesito AYUDA.

Pues nada, un post aburrido pero es lo que hay…No estoy inspirada aunque quería contarles lo que me pasa.

¡Gracias por leerme y por seguir el blog porque llevaba mucho tiempo sin ponerme al día!

 

 

¿Qué implica tener un hijo?

Hace unos días,  alguien muy cercano dijo que «no pensaba tener más hijos porque no quería que le corten la libertad» y me dejó pensando…

Pensé en las implicaciones de tener un hijo, tanto las ventajas, como las desventajas, (si las hubiera y si se pueden llamar así) y llegué a varias conclusiones:

-Cuando uno tiene un hijo, dejas de pensar en tí, (y en muchos otros, jeje!), porque tu hijo pasa a ser lo más importante de tu vida, el motivo por el que te levantas cada día con una sonrisa, dejas de ocuparte de ti misma, el egoísmo y la vanidad pasan a último plano y te preocupas y te ocupas con toda el alma, cuerpo, corazón y mente de ese ser tan pequeñito que te reclama constantemente.

-Respecto a que «corta la libertad», creo que es una libertad que no es el verdadero concepto en sí, digamos que temporalmente se terminan muchas salidas que no puedes hacer con un bebé, (ir al cine, salir a bailar, o estar de copas), esas cosas, pero empieza otro concepto de libertad porque te cambia completamente la forma de pensar y salir a dar un paseo en familia también significa un nuevo estilo de libertad desconocido hasta el momento pero igual o mas bonito… La libertad es todo lo que uno haga voluntariamente, porque cada uno tiene el derecho a  elegir sobre cada cosa que hace. Por eso se puede uno sentir prisionero sin haber tenido hijos y sentir libre teniendo una gran familia…

-Una contra: los miedos. Para mí, esto es lo peor, porque vayas donde vayas y estés donde estés, siempre aparecen y la gran mayoría de las veces son irracionales, pero es muy difícil controlarlos, porque a veces son ellos los que te controlan a ti. Por ejemplo, ahora, embarazada y con un niño pequeño me da cada vez más miedo viajar, pero si dejara que me maneje el miedo, ya no podría ir a ninguna parte. No se puede tener a nuestros niños en una burbuja. ¡¡Lo digo y me lo afirmo, a ver si así me lo creo, jejeje!!

-Y el tiempo: se vuelve relativo. No te alcanzan las 24 horas del día para dedicárselas todas y más a tu hijo, nunca te alcanza; cuando es pequeño es practicamente imposible poder hacer más cosas que cuidarlo y estar pendiente de él a cada minuto. Además, si tienes que irte donde sea y quedas a una hora, es imposible cumplir, porque «desde que ensillas hasta que montas» es muy variable; por ejemplo, a Samu cada vez que vamos a salir se le ocurre hacer caquita o dormirse, así que es complicado…

-Un hijo implica darse, brindarse, darlo todo y que si en cualquier momento corriera peligro, serías la primera leona en intentar salvarlo luchando con todas las garras o en dejarte morir, para que él viva, tu vida misma pasa a un segundo plano, porque él es tan importante que está por encima de todo.

-Un hijo implica que te cambie la vida por completo, que te sientas llena, completa y realizada, aunque no practiques tu formación ni tengas grandes oportunidades económicas o materiales, porque todo lo demás es solo una pequeña parte en relación a lo que significa tu hijo.

-Un hijo implica gastos, pero no exagerados como mucha gente cree, además, donde hay dos comen tres. De todas formas si no se tienen hijos seguro que se utilizaría el mismo dinero para cosas superfluas, por lo que es preferible utilizarlo en criar una vida, ¿no?

-Un hijo es lo más de lo más, lo máximo, el más puro amor, e implica, por sobre todas las cosas, abrir el corazón, entregar todo el amor y recibir a cambio sonrisas, ternura, travesuras, besos llenos de chocolate, mimos, mil abrazos buscando protección cuando llora, sabiendo que tú eres su héroe…

Y me pregunto: si un hijo implica todo eso, ¿qué implicarán dos? En un tiempo les contaré, pero por sobre todas las cosas quiero decir que estoy muy feliz de ser mamá…